Vora Arquitectura
Nos interesa la dualidad continuidad / transformación que implica la posibilidad de intervenir desde el proyecto en el territorio y en la ciudad.
Cada hecho arquitectónico es un grano de arena más, que se añade a un continuum que lleva miles de años construyéndose, moldeándose. Este pensamiento puede llegar a anular. También nos hace sentir parte de algo más allá de nosotros mismos, y nos protege de la tentación egocéntrica de todo acto creador. Nos sentimos fuertemente responsables de actuar en continuidad con el entorno físico que heredamos, acumulado a lo largo de los tiempos … y de no errar.
Construir tiene un poder de transformación enorme, cualquier decisión arquitectónica sobre el territorio y la ciudad puede tener un gran impacto sobre la memoria colectiva. Implica un peso de responsabilidad, que se transforma en vértigo. La posibilidad activa de esta transformación y las posibilidades de mejora es, también, altamente motivadora.
La necesidad de continuidad y el poder activo de la transformación son los sentimientos básicos que intentamos combinar en la medida que cada situación requiere. Encontrar el punto de equilibrio es lo que nos motiva, cada día, a seguir reflexionando sobre lo que hacemos, para que nuestra aportación sea indudablemente positiva.